José Portillo

Sí importa. De José Portillo

Déjeme decirle que su voto, involucramiento y opinión sí importan, créame que a Messi y a Ronaldo no les quita el sueño si usted tiene trabajo, le cobran renta, lo asaltan en el bus o si aquí se pierde la república.

José Portillo, 27 abril 2017 / EDH

Muchas veces escuchamos a personas decir que no importa quién gobierne todo seguirá igual, que para qué opinar o involucrarse si nada cambia, que todos los políticos son iguales y de poco sirve incluso ir a votar. De hecho hemos tenido eventos electorales con abstencionismo de hasta el 65 %. A estas personas, de ahora en adelante, les preguntaré qué significado tiene para ellos la palabra igual.

Comienzo por el más evidente problema que tenemos actualmente: un gobierno a la deriva, sin líder ni plan, ni nada que se le asemeje. Basta ver los eventos recientes, donde en una misma conferencia de prensa tres funcionarios dieron recomendaciones contradictorias entre sí. Fue obvio que no hubo una reunión previa para consensuar ideas y elaborar un sencillo comunicado, mucho menos designar a un portavoz oficial ante la ausencia del presidente, que es el llamado a dar la cara e infundir calma en momentos difíciles, como lo fue el enjambre sísmico.

En la historia reciente del país, por primera vez hemos sido degradados a nivel de “bonos basura”, es decir, el afamado cambio sirvió para empeorar, dado que antes éramos grado inversión a la par de países como Chile. Para los que decían que aquí no podíamos llegar a ser igual que Venezuela, les cuento que ya somos. ¿Pero qué significa esto para usted, amigo que me lee? Que si usted le debe al banco, su tasa de interés irá hacia arriba. En la empresa privada el costo financiero impacta directamente en el costo de los bienes producidos o comercializados, es decir, usted pagará más por lo mismo.

Ante esta situación, cualquiera pensaría que el Ejecutivo estaría por implementar un ambicioso plan de recortes para reducir el gasto estatal, congelando contrataciones de nuevas plazas, reduciendo el número de asesores a la mínima expresión, eliminando de tajo; la publicidad gubernamental, seguros médicos privados y viajes al exterior. Pero no, no se emocione, amigo lector, nada de eso está siendo siquiera considerado por el Ejecutivo. Lejos de eso, acaban de re estructurar el presupuesto reduciendo las asignaciones a las carteras de salud, educación y seguridad. Es decir, en lugar de abordar el problema desde una perspectiva técnica y pragmática, han recurrido a lo único que saben hacer: culpar a ARENA, como si así se va resolver el problema de exceso de gastos.

Ante un panorama tan poco prometedor, está pasando lo que tenía que pasar, somos el país con menor inversión extranjera en la región, con el menor crecimiento en términos porcentuales y absolutos. Usted se preguntará, ¿y esto en qué me afecta? Sencillo, si usted está sin empleo o en un empleo que le paga por debajo de su capacidad o preparación, sus probabilidades de mejora son escasas o nulas, dado que hay demasiadas personas para muy pocos puestos de trabajo. Como consecuencia lógica, veremos a más hermanos salvadoreños buscando migrar, perpetuando así el ciclo de desintegración familiar, que ya mucho nos ha costado.

Por lo antes expuesto déjeme decirle que su voto, involucramiento y opinión sí importan, créame que a Messi y a Ronaldo no les quita el sueño si usted tiene trabajo, le cobran renta, lo asaltan en el bus o si aquí se pierde la república.

Ya es hora que como sociedad despertemos, nos informemos y busquemos educarnos para entender cómo funciona nuestro sistema de gobierno, de tal manera que sepamos, qué podemos y debemos esperar de cada institución o funcionario de gobierno. El fútbol es lindo, pero de ver partidos no se come ni se hace patria.

@jpelsalvador

Sin señales positivas. De José Portillo

joseportillo.pngJosé Portillo, 5 enero 2017 / EDH

A siete años y medio de gobiernos del FMLN, donde hemos visto al país profundizar su crisis de seguridad, económica y política, nos encontramos con la triste realidad que el principal partido de oposición no termina de entender que no está en sintonía con el sentir y pensar de la mayoría de personas que dicen representar, sencillamente están desconectados de buena parte del electorado. Basta conversar con personas no partidarias, de pensamiento republicano y libertario, para comprender la dimensión del problema.

ARENA tiene como principal problema su falta de coherencia entre discurso y acción. Qué mejor ejemplo que el seguro médico privado de la Asamblea Legislativa, para el cual, con excepción de Juan Valiente y Johnny Wright, todos dieron sus votos. El discurso que escuchamos previo a la votación fue de austeridad, pero a la hora crucial, el 95 % de la fracción dio su aval para aprobar un seguro medico privado que nos cuesta a los contribuyentes seis y medio millones de dólares.  Los legisladores de todas las fracciones incluidos los de ARENA, sin duda piensan que están por encima del trabajador promedio, y que para ellos es indigno ir al Seguro Social o sistema público de salud.

diario hoyHemos visto a la fracción tricolor justificadamente oponerse hasta la saciedad, a la aprobación del presupuesto 2017, dado que como ya es costumbre del Ejecutivo, este no incluye todos los gastos, y al igual que en  2016, sobreestima los ingresos. Lo que no hemos visto es que ARENA, con su experiencia de 20 años al frente del Ejecutivo, presente un proyecto de presupuesto que se ajuste a la realidad actual, y más importante aún, que plantee una reducción del tamaño del estado. Pregunto; ¿Cuándo vamos a escucharlos hablar de reducir el número de diputados y asesores? ¿Nadie de la cúpula de ARENA piensa que tenemos demasiadas alcaldías? ¿Cuándo proponen eliminar cientos de plazas innecesarias como la de Gobernador? ¿Algún día presentarán un proyecto de ley para eliminar la publicidad y seguros médicos privados de todos los órganos del Estado?  Me disculpan señores, pero no solo en el Ejecutivo hay despilfarro.

Sin lugar a duda, el FMLN ha hecho todo lo posible para espantar a los inversionistas, seguimos estando en último lugar en Centro América, recibiendo apenas un 4 % del total de la inversión extranjera que llega a la región. Ante esta debacle, hemos escuchado a ARENA criticar públicamente al Ejecutivo por sus desaciertos, lo cual es natural entre políticos. Lo que nos quedan debiendo es el cómo. ARENA debe presentar a la mayor brevedad, el plan concreto y visión de país que, a su parecer, nos puede sacar de la crisis. Ser el opuesto del FMLN no es suficiente, los ciudadanos, a todo nivel, necesitamos sentirnos representados en ese plan. No queremos oír jingles o slogans pegajosos, necesitamos propuestas puntuales, que puedan ser analizadas, discutidas y revisadas, ya basta de parecer, hay que ser.

Si quieren ser una opción para el elector en 2018 y 2019, es hora de dejar de darse paja entre cheros, bajarle al ego, abrir bien los oídos, y escuchar no para responder, sino para entender lo que el elector piensa y siente. Este país necesita un cambio, pero no solo de partido en el gobierno, sino de forma de ejercer el poder, donde los gobernantes representen legítimamente a los gobernados. En este 2017, los ciudadanos estaremos atentos, para vigilar que los funcionarios cumplan sus promesas de campaña y actúen en beneficio del electorado que dicen representar. Señores de ARENA, si están esperanzados en ganar elecciones a punta de señalar los errores del oponente, déjenme recordarles que esa fórmula ya la probaron, ahí se acuerdan qué pasó.

@jpelsalvador

Nepotismo es corrupción. De Luis Portillo

Construyendo una red de primos y parientes, el corrupto se asegura lealtad y sigilo total.

luis r. portilloLuis Portillo, 22 octubre 2015 / EDH

La “cherada”, el “compadrazgo”, los “conectes”, han sido siempre la fuente de descontento de los que vemos la meritocracia como la única alternativa para salir de la mediocridad de la gestión pública, a la cual hemos sido sometidos los ciudadanas desde siempre. El nepotismo es la preferencia que algunos dan a sus parientes para las concesiones o empleos públicos. La historia del nepotismo es tan antigua como la misma civilización humana. Uno de los casos mas emblemáticos fue el nombramiento que hizo Napoleón Bonaparte de su hermano José Bonaparte como Rey de España, a quien llamaban Pepe Botella por su conocido alcoholismo.

Desde el año 2006, tenemos una Ley de Ética Gubernamental que como muchas otras leyes se ha convertido en letra muerta. En esa época la Asamblea Legislativa reconoció que La Convención Interamericana contra la Corrupción (CICC, casi CICI) había sido ratificada por El Salvador y que hemos suscrito convenios para combatir la corrupción y adquirido compromisos con el mismo fin de conformidad con el Tratado Marco de Seguridad en Centro América, desde 1998. Todo lo anterior, aunque usted no lo crea!

La ley de Ética aplica a TODOS los servidores públicos (Art. 2) que presten servicio en cualquier entidad estatal o municipal, dentro o fuera del territorio de la República. Es suficientemente clara para repetirlo, aplica a TODOS. También en el Artículo 3, define muy bien a los servidores públicos (Funcionarios y empleados) lo cual incluye a los que ocupan una posición remunerada ó ad honorem (es decir sin sueldo, como está de moda). Otras definiciones también incluyen la de Corrupción: El uso y abuso del cargo y de los bienes públicos, cometido por servidor público, por acción u omisión, para la obtención de un beneficio económico o de otra índole, para sí o a favor de un tercero. Finalmente, la definición de Conflicto de Intereses: Son aquellas  situaciones en que el interés personal del servidor público o sus parientes dentro del cuarto grado de consanguinidad y segundo de afinidad, entran en pugna con el interés público.

Servidores públicos, les recordamos que tienen prohibido muchas cosas, pero específicamente por la Ley de Ética, no pueden: Prevalecerse de su cargo público para obtener o procurar beneficios privados (como empleos a sus parientes), intervenir en cualquier asunto en el que él o algún miembro de su unidad familiar tenga conflicto de intereses (licitaciones, compras directas, empleos en otras instituciones, etc.) y nombrar a parientes dentro del cuarto grado de consanguinidad o segundo de afinidad, para que presten servicios en la entidad que preside o se desempeñe (como que su hermano, primo, cónyuge o hijos trabajen en la misma entidad por ejemplo).

La Ley de Ética es tan clara, que no permite o hace consideraciones por la capacidad o méritos que tenga el pariente del servidor publico, y tampoco hace excepciones si el pariente no recibe un sueldo. ¿Por qué? Se preguntarán algunos. La respuesta es muy sencilla, muy pocos padres que están dispuestos a despedir a sus hijos, por lo que la evaluación no es una opción. Tampoco ha nacido el valiente que quiera señalar el mal trabajo y mucho menos despedir a su esposa por bajo desempeño.

EL-DIARIO-DE-HOY-LOGOSin embargo, más que la deficiencia en las labores de los parientes, en realidad, el mayor riesgo al que nos exponemos los contribuyentes es la corrupción. La mayoría de casos de nepotismo es la antesala de la corrupción. Contratando parientes y allegados, es cómo los corruptos ocupan plazas claves y evitan ser denunciados. Construyendo una red de primos y parientes, el corrupto se asegura lealtad y sigilo total. El simple hecho que se usa una posición en el gobierno para que un pariente tenga un sueldo se convierte en sí misma en corrupción, según la Ley de Ética.

A los que argumentan méritos y otros cuentos, primero tienen que entender que la ley se cumple. Segundo, si vamos a hablar de méritos y capacidad, sin duda un pariente con tales calificaciones no tendría problema encontrando un trabajo bien remunerado en el sector privado. Por lo que cualquiera puede llegar a concluir que en realidad no existe tal “mérito”, o el propósito de tener al pariente va más haya del sueldo a recibir y eso suena a corrupción. Los ciudadanos ya estamos cansados de ver tanta corrupción desde siempre. Ya no soportamos ver a tanto joven desempleado y a tanto pariente de burócrata calentando las sillas. Es la hora de la denuncia ciudadana, es la hora de hacer cumplir la ley.

Los movimientos ciudadanos. De José Portillo

Mucho se ha hablado de los movimientos ciudadanos en sus distintas expresiones, cuestionando la mayoría de detractores, no la conveniencia o necesidad de sus propuestas o planteamientos, sino más bien, sin fundamento o prueba alguna, ponen en tela de juicio quién o quiénes, a su parecer, están detrás de dichas expresiones, buscando así minar la credibilidad de la propuesta.

José Portillo, 1 octubre 2015 / EDH

Los detractores, buscan atribuir las expresiones ciudadanas al bando político contrario, entre lineas se lee el siguiente mensaje; “si tú no perteneces a uno de los dos partidos mayoritarios, no tienes voz”. Para los críticos de los movimientos ciudadanos es imposible pensar que un grupo de personas pueda definir por sí mismo una línea de pensamiento y elaborar un planteamiento acorde. Para estos personajes, todos somos súbditos de uno de los dos partidos mayoritarios y,  por ende, dan por nula cualquier expresión de autodeterminación o iniciativa individual.

A los ojos de estos, la libre expresión sólo existe dentro de los márgenes de las opiniones político partidarias vigentes, platean un duopolio del pensamiento político, en el que los dueños son las dos fuerzas mayoritarias. Una visión corta e interesada de la realidad. En su opinión, los opositores del libre pensamiento, fallan en entender, que el abstencionismo electoral, es precisamente un rechazo a las fuerzas políticas actuales. Miles de ciudadanos, simplemente no se sienten representados por los institutos políticos o,  en ocasiones, no están de acuerdo en todos los temas con una misma filosofía partidaria, prueba de ello el voto cruzado.

Los funcionarios de elección publica o segundo grado, lejos de socavar, deben buscar entender la inconformidad expresada por medio de la propuesta, especialmente antes de criticar. Estas expresiones civiles, les presentan una oportunidad de recolectar información, útil para su gestión publica. El resultar electo en comicios, es sólo el principio del ejercicio democrático. Una vez juramentado en el puesto, el funcionario enfrenta el reto, de entender y resolver los problemas del elector, los cuales cambian con el tiempo y circunstancias. En esta tarea, la ciudadanía puede y debe ser de gran ayuda.

Como parte de la sociedad civil, todos tenemos derecho a expresarnos y a ser escuchados, sin miramientos ni juicios de valor preconcebidos. Las propuestas de hoy, deben ser analizadas por nuestros funcionarios a través del lente del tiempo, por ejemplo: ¿Una CICISV será conveniente para el país cuando yo ya no sea gobierno sino oposición? ¿Las elecciones de funcionarios de segundo grado están libres del sesgo partidario? Si la respuesta es no, ¿Que pasará cuando yo deje de ser partido en el gobierno o mayoritario? En el pasado, más de un partido ha tomado posturas asumiendo que estarían eternamente en el poder, hoy pagan la cuenta de sus malas decisiones.

El Salvador ha despertado, los ciudadanos no estamos dispuestos a ser simples espectadores; queremos aportar, contribuir, participar del debate. Al gobierno de turno, siempre le convendrá escuchar atentamente al elector, así como también, a los electores nos debe interesar, que el gobierno de turno, sea exitoso en su gestión. Escucharnos, es algo mucho más dinámico y complejo que analizar los resultados en las urnas cada tres o cinco años. A todos los funcionarios y líderes políticos, con mucho respeto les decimos, este país, también es de nosotros. Juntos, ustedes en su calidad de gobernantes y nosotros como parte de la sociedad civil, podemos construir día a día una nación libre de violencia, corrupción e impunidad.

@jpelsalvador

Tu voto

«Antes de llegar a las urnas este primero de marzo, debemos caer en cuenta que no estamos eligiendo poeta ni orador, no es concurso para votar por el más elocuente. Estamos escogiendo alcaldes y diputados, que tomarán las decisiones más importantes en la vida nacional durante los siguientes 3 años, que decidirán cómo vivirá tu familia y la mía», escribe el columnista de El Diario de Hoy.

José Portillo

Este primero de marzo se llevará acabo un evento electoral, donde se enfrenta el ya conocido populismo totalitario de izquierda representado por el FMLN y sus candidatos, contra la renovación partidaria planteada por primera vez en la oferta electoral de ARENA. Mientras la cúpula del FMLN pide voto por bandera, es decir, exige lealtad y obediencia a sus bases, ARENA muestra apertura, representatividad y frescura en sus cuadros.

El epicentro de esta contienda es la alcaldía de San Salvador, donde Edwin Zamora se convierte en el único candidato en atreverse a hacer lo impensable, nos invita a trabajar juntos para mejorar nuestra capital. La audacia de su propuesta radica en el simple hecho que estamos en un momento donde más que una elección, parece una competencia de quién ofrece regalar más. Regalos que obviamente no saldrán del bolsillo propio, sino que serán patrocinados por los impuestos que todos pagamos, o la deuda que sin duda contraerán, para hacerle frente a sus incontables propuestas, que luego deberán ser canceladas por presentes y futuras generaciones.

Zamora invita a hacer lo que sabe hacer, que es trabajar. No nos habla de recetas mágicas, tampoco nos dice qué tan fácil será, si simplemente votamos por él. En su plan de gobierno, el cual he leído, hay números concretos de costos asociados a sus propuestas y fuentes de financiamiento de las mismas. Nada de fantasía ni ilusión, pura realidad.

551498_1558370631068070_2828041713877914069_nPor su parte el candidato por el FMLN a la alcaldía de San Salvador, ha sido tan desmesurado en sus planteamientos, que no se atrevió a poner en su plan de gobierno el costo de sus ideas, mucho menos cómo lo va a pagar, muestra inequívoca de la inviabilidad de sus propuestas. Su eslogan más que «nuevas ideas» debió ser «todo gratis», dado que al parecer, de ganar, nunca nadie tendrá que pagar por nada.

La campaña de Nayib Bukele es meramente una invitación a soñar. Lástima que los problemas no se arreglan simplemente soñando, sino trabajando. En seis distintas oportunidades, cuestioné por este medio las ideas del candidato Bukele. Solicité repetidamente una explicación numérica que fundamente la viabilidad de las mismas, en un intento de generar un espacio de discusión, sin recibir nunca una respuesta.

Desafortunadamente, el candidato del FMLN nos demostró ser enemigo de los cuestionamientos, aunque sean hechos respetuosamente y con base numérica. Simplemente descalificó a cualquier persona o pregunta que le incomodase. Conducta muy propia de algunos líderes de su partido, como máximo ejemplo, Sigfrido Reyes.

Al elegir entre estos dos candidatos, debemos entender a profundidad por qué y por quién estamos votando. Es necesario dilucidar, si el candidato al que le vamos a entregar nuestro voto representa nuestras creencias, principios y valores. En la elección de gobernantes no hay espacio para el análisis de corto plazo. Debemos elegir candidatos tolerantes, que respondan profesional y sinceramente ante las criticas, financieramente responsables en sus ofertas, que cumplan sus promesas, y que no tengan miedo de admitir la religión que profesan. En otras palabras, necesitamos gobernantes transparentes.

Antes de llegar a las urnas este primero de marzo, debemos caer en cuenta que no estamos eligiendo poeta ni orador, no es concurso para votar por el más elocuente. Estamos escogiendo alcaldes y diputados, que tomarán las decisiones más importantes en la vida nacional durante los siguientes 3 años, que decidirán cómo vivirá tu familia y la mía.

Ya en el 2009 la población eligió al que hablaba más bonito, un entrevistador de nombre Mauricio Funes. Pregunto, ¿estamos dispuestos a cometer dos veces el mismo error?

*Colaborador de El Diario de Hoy.

Sr. Bukele, ¿y sus propuestas?

Otro análisis del primer debate Bukele-Zamora que vimos en el programa de Nacho Castillo. José Portillo somete a un examen crítico los planteamientos del candidato de las #nuevasideas. Su dictamen: No hay propuestas.

Logo SVJosé Portillo

La noche del 27 de enero seguí el debate entre usted, Nayib Bukele, y Edwin Zamora, bajo el entendido de que ambos presentarían sus propuestas concretas para la capital, en un afán de explicar a la población sus soluciones a los problemas que a diario nos aquejan. Para mi sorpresa, usted llegó al debate lleno de arrogancia, acusaciones e historias de Nuevo Cuscatlán, pero sin una tan sola propuesta puntual para la capital.

La primera idea que escuché de usted al inicio de la carrera por la silla edilicia, fue en la entrevista matutina de TCS, del 13 de octubre de 2014. En ella usted aseguró, que en el centro de San Salvador hay infraestructura valorada en diez mil millones de dólares, y que pediría a los propietarios de esa infraestructura, invirtieran un 3% del supuesto valor de la misma para renovar el centro histórico. Es decir, de ellos según sus cálculos, obtendría 300 millones de dólares para renovar el corazón de la capital. Pregunto: ¿Por qué en el debate no escuchamos nada de esta idea? ¿Ya no figura dentro de sus «nuevas ideas» reactivar y ordenar el centro? ¿Nos va a contar quién realizó el valúo que estimó en diez mil millones de dólares el centro de la capital? ¿Sabe usted que con diez mil millones de dólares se pueden construir 110 centros comerciales del tamaño de Multi Plaza? ¿Puede usted mostrarnos en el centro de la capital donde hay 110 estructuras de esa envergadura?

Su exposición, en términos de ideas, se redujo a repetir innumerables veces que reforzaría el CAM, supuestamente usando cámaras de reconocimiento facial, como las que vemos en películas o programas de acción televisivos. Pero nada escuchamos de los 800 nuevos agentes que ofreció contratar en otra entrevista de TCS, para ganar control territorial, como mencionó en dicha ocasión. Tampoco concretó, lo que debemos entender específicamente cuando dice que «reforzará» el CAM. Me queda la duda: ¿Ya no contratará los 800 agentes que prometió? ¿Qué debemos entender cuando dice que reforzará el CAM? ¿Cree usted que la violencia bajará 90 % con sólo instalar cámaras como aseguró que había sucedido en Guatemala?

Si algo quedó evidenciado en el debate, es que usted llegó sin un plan ni nada que se le asemeje. Pero aseguró, que el cuatro de febrero presentaría su propuesta para gobernar la capital; quedo a la espera. Personalmente, esa noche fue la primera ocasión en que le escuché hablar de un plan de gobierno municipal. Convenientemente, éste saldrá dos semanas después que el del candidato de ARENA, lo cual llama la atención dado que usted ingresó a la carrera en agosto y Edwin Zamora en octubre. Pregunto: ¿Usted realmente tenía pensado presentar un plan? ¿O estamos más bien viendo una reacción a la propuesta del candidato Zamora?

En el debate, usted aseguró que había realizado 115 mil consultas ciudadanas, para incorporar dichos aportes al plan de gobierno municipal que supuestamente presentará la próxima semana. Es decir, de acuerdo con su afirmación ha entrevistado a uno de cada cuatro capitalinos incluyendo menores de edad. De ser cierta esa afirmación, no hay casa en San Salvador que usted no haya visitado. Pregunto a los capitalinos: ¿Llegó el candidato Bukele a su casa? ¿Cuántas personas conoce usted que han sido entrevistadas para el plan de gobierno del Sr. Bukele? ¿Será esta otra de las múltiples sobrestimaciones del candidato del FMLN?

Señor Bukele, su intervención dejó la duda entre los televidentes, si usted en realidad entiende la importancia de tener un plan concreto cuando se enfrentan retos mayores. Comprendo que una alcaldía pequeña pueda ser manejada de forma improvisada, incluso se puede llegar a ser exitoso sin tener un plan. Pero por favor, no espere que creamos que manejar San Salvador es lo mismo que manejar Nuevo Cuscatlán. Es imposible simplemente replicar las acciones realizadas en una ciudad y aplicarlas en la otra, y esperar tener el mismo resultado.

No es lo mismo manejar una linda bicicleta que una moto de carreras, no se confunda.

 

Originalmente publicado en El Diario de Hoy.