En el último período legislativo, el diputado del PCN multiplicó su patrimonio líquido 2.6 veces, pasando de una fortuna individual de $1.47 millones en 2012 a $3.87 millones al inicio de esta legislatura. El legislador no responde a las solicitudes de entrevista por este caso.
Patrimonio. Francisco Merino aumentó en $2.4 millones su patrimonio líquido, mientras sus deudas disminuyeron. El aumento está distribuido, sobre todo, entre bienes muebles e inmuebles.
Francisco Merino regresó a la Asamblea Legislativa en 1997 después de un hiato durante el cual fue vicepresidente de la República, ministro del Interior y diputado del Parlamento Centroamericano. Ese año, su declaración jurada de patrimonio ante la Sección de Probidad de la Corte Suprema de Justicia muestra que tenía un patrimonio líquido individual de $1,126,628.
Su paso como diputado suplente se vio pausado cuando fue elegido para ser presidente de la Corte de Cuentas entre 1998 y 1999. Después de un historial dentro del partido Alianza Republicana Nacionalista, Merino entró en 2000 a la Asamblea Legislativa como diputado propietario de San Vicente por el entonces llamado Partido de Conciliación Nacional (PCN), a cuya bancada ha pertenecido desde entonces.
Desde 2000 hasta 2012, el patrimonio líquido del diputado pecenista mostró pocas variaciones, manteniéndose entre los $1.3 y $1.48 millones de forma individual y entre los $1.3 y $1.88 millones como conjunto familiar.
En la última legislatura, sin embargo, el patrimonio líquido del diputado pasó de $1,467,847 a $3,873,657 en el período de tres años. El aumento, además, se registró únicamente dentro del patrimonio individual del legislador. Es decir, solo Francisco Merino se hizo de más de $2.4 millones en cuestión de un período legislativo. Al mismo tiempo, sus deudas disminuyeron de $203,689 a $174,447.
LA PRENSA GRÁFICA buscó al diputado Merino desde el viernes pasado por medio de llamadas telefónicas a su celular personal y a través de su equipo de comunicaciones. Incluso, periodistas buscaron ayer mismo al legislador dentro del recinto legislativo, pero evadió hablar de su caso.
Hasta el cierre de esta nota, ni Merino ni sus comunicaciones habían dado una respuesta a las interrogantes sobre este caso.
En la declaración para la Sección de Probidad, se observa que los bienes muebles del diputado Merino aumentaron en 1,126 % en tres años, pasando de $98,921.24 en 2012 a $1,212,979.47 en 2015. Sus bienes inmuebles también dieron un gran salto, aunque no tanto como estos. Merino pasó de tener $1,233,000 en bienes inmuebles en 2012 a acumular bienes inmuebles por $2,471,229 en 2015.
En noviembre de 2013, el padre del diputado, Francisco Merino González, quien fue fundador del Instituto Migueleño de Comercio, falleció. No se ha podido constatar si el diputado, uno de cuatro hermanos, recibió alguna herencia.
En las últimas dos legislaturas, Merino además ha sido miembro de la junta directiva de la Asamblea Legislativa y, al igual que el diputado Guillermo Gallegos, de GANA, esto le significó un aumento considerable en sus ingresos por aguinaldos, vacaciones, sobresueldos y otros. De una legislatura para otra, el diputado pasó de obtener solo $1,500 anuales a acumular ingresos por $66,607 anuales en este rubro, superando el salario que devengó de $62,701 anuales en esos seis años.
La última legislatura, los ingresos por aguinaldos y sobresueldos no solo superaron su salario anual, lo triplicaron. Con un sueldo mensual de $2,568 en la última legislatura, obtuvo $30,822.96 anuales en sueldo, mientras que declaró $84,259.76 en bonos.
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